No hay peruano que no vea por todos los distritos de Lima a los amigos inmigrantes de Venezuela.
Han invadido Lima, son personas de ambos sexos y hasta con niños, que trabajan honradamente.
El inmigrante venezolano, es una persona correcta, educada, muy amable, trabajador incansable.
Yo camino mucho por los juzgados del Distrito de San Juan de Miraflores y como tengo distintos negocios, me veo obligado a recurrir seguido a las empresas que hacen banderolas, carteles, letreros en banner. En Ciudad de Dios hay varias que te hacen toda clase de carteles y por eso seguido camino por alli y veo siempre a los amigos y amigas venezolanos.
Y caramba que las venezolanas, son mujeres muy atractivas, chambeadoras y estan a diario buscandose el sustento.
Por eso a mis compatriotas de todo el país, les pido encarecidamente que apoyen de todo corazón a estas personas , que por tener la desgracia de tener un dictador comunista en su tierra, se ven obligados a huir de su país.
Cuando ud pueda señor,señora, joven...comprele a un venezolano sus productos. Colabore con estas personas, que a la larga son nuestros hermanos y piense que nosotros podríamos pasar por lo mismo.
Ellos le ofrecerán : una arepa, dulces , tizana, que son muy agradables y les permite a ellos , salir adelante.
Menos mal que las autoridades de inmigración les están dando facilidades, para que puedan estar mejor en nuestro país.
Ante la crisis actual,en Venezuela, muchos venezolanos huyen a otros países de Sudamérica. En Perú, el gobierno quiere darles la posibilidad de un nuevo comienzo: un permiso de residencia y trabajo.
Las arepas y la tizana de Venezuela son la última sensación en las calles de Lima, considerada la capital gastronómica de Latinoamérica, gracias a los numerosos venezolanos llegados a Perú en los últimos meses con el propósito de progresar lejos de la grave crisis económica que afronta su país.
Tenga ademas en cuenta que los venezolanos que ud ve en las calles vendiendo no son personas iletradas, ignorantes....
Estudiantes, ingenieros, mecánicos y periodistas venezolanos, entre otras muchas profesiones, encontraron en la venta callejera de su comida popular un primer paso para establecerse en Perú, ganar alrededor del triple de lo que recibían en su país y aspirar a gozar de una mejor calidad de vida.
Esa presencia venezolana en Lima es notoria en el centro histórico de la ciudad, que cada tarde se llena de decenas de venezolanos, la gran mayoría hombres, con cajones llenos de arepas al hombro o con un balde de tizana a rastras, y que triunfan con su propuesta gastronómica.
A pesar de la variada competencia de comida al paso que existe en la capital peruana, como el ceviche, los anticuchos, el arroz chaufa y las papas con huevo, las arepas y la tizana levantan la curiosidad de los limeños, ya que muchos las saborean por primera vez.
A estas personas, a estos inmigrantes venezolanos, hay que ayudarles, tenderles la mano. Por eso nuevamente pido a nuestros compatriotas, que si ud puede darle un trabajo, un alquiler de vivienda, a un venezolano, lo haga, pensando en que ellos están aquí obligados por su gobierno, que los persigue, mata de hambre y asesina en su propio país.
VIVA VENEZUELA SIN NICOLAS MADURO
APOYEMOS A ESTA GENTE HONRADA Y TRABAJADORA....
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