Valentino Rossi ha realizado una temporada 2018 para olvidar: la Yamaha YZF-M1 no ha sido lo suficientemente competitiva y el italiano no ha podido subir a lo más alto del podio en todo el año.
Por otra parte, este año también ha sido uno de los más fructíferos para Rossi, pero en su faceta de propietario de un equipo. Ha sido la primera vez que la VR46, la estructura del italiano, estructura del italiano ha conseguido un título de campeón del mundo con Pecco Bagnaia en Moto2.
VR46 Riders Academy: La idea que surgió de una casualidad
Valentino Rossi es uno de los principales culpables de que la cantera italiana cada vez sea mayor. El de Tavullia mediante la VR46 Riders Academy entrena a las jóvenes promesas cuyo sueño es llegar al Campeonato del Mundo de MotoGP. Esta escuela tiene una emotiva historia detrás.
Marco Simoncelli le propuso a Valentino Rossi la idea de entrenar junto a él Cuando Marco Simoncelli comenzó a labrarse un nombre en el paddock de MotoGP le propuso a Valentino Rossi entrenar juntos. Al principio Rossi confesó sus reticencias a la propuesta de su compatriota porque, al fin y al cabo, eran rivales en pista. Finalmente Rossi accedió y comenzaron a entrenar de manera conjunta y de ahí surgió la inseparable amistad entre ambos.
Por desgracia, en octubre de 2011 durante el GP de Malasia, Marco Simoncelli se encontró con una trágica muerte. Valentino Rossi entonces, tras la dolorosa despedida, tomó la decisión de seguir entrenando a pilotos jóvenes en honor a su malogrado amigo.
Así se inició en Tavullia, en el rancho de Valentino Rossi, la historia de la VR46 Riders Academy. El primero en instruirse fue el hermano del propio Rossi, Luca Marini, quien junto a Pecco Bagnaia iniciaron un proyecto cuya misión era (y sigue siendo) devolver a lo más alto al motociclismo italiano después de unos años de férreo dominio español.
Tras Marini y Bagnaia llegó una ingente hornada de pilotos jóvenes como Romano Fenati, Andrea Migno, Niccolò Antonelli, Niccolò Bulega, Stefano Manzi, Celestino Vietti, Marco Bezzecchi… una lista que cada año se amplía año tras año.
Los esfuerzos de Valentino Rossi estaban claros y el doctor sabía que no bastaba con entrenar; había que formar una escuadra propia en el mundial. Así en 2014 nació el VR46 Sky Racing Team en Moto3. Tres temporadas más tarde, en 2017, Rossi expandió su estructura y llegó a Moto2
Los pupilos de Valentino Rossi acaban con la sequía italiana
En 2017 fue la primera vez que un piloto de la VR46 Riders Academy ganó un título mundial, aunque no fue con el equipo de Valentino Rossi. Franco Morbidellise proclamó campeón del mundo de la categoría intermedia y puso fin a una sequía de títulos para Italia de ocho años, desde el último del propio Rossi en 2009 en MotoGP.
En 2018 Rossi ha recogido sus frutos por segundo año consecutivo y por primera vez desde que fundó su propia estructura un piloto del equipo VR46 ha ganado un campeonato del mundo. Ha sido Pecco Bagnaia quien se ha hecho con el mundial de Moto2 dándole la mayor alegría que cabría esperar al de Tavullia en un año para olvidar.
Además, este 2018, su hermano Luca Marini ha cosechado su primera victoria en el mundial. Fue durante el GP de Malasia, en la misma cita en la que su compañero Bagnaia se puso la corona de campeón.
En la categoría de Moto3 Marco Bezzecchi ha rozado el título con los dedos, aunque finalmente se ha decidido en favor del español Jorge Martín. Pese no haber conseguido llevarse los laureles, Bezzecchi se ha consagrado como una de las referencias en el paddock cosechando cinco podios y tres victorias y augurándose un futuro prometedor junto a KTM en Moto2.
Por el momento Valentino Rossi ya tiene a dos de sus pupilos proclamados como campeones del mundo y los dos se encuentran este próximo 2019 como pilotos de MotoGP. A las estructuras de Rossi en Moto3 y Moto2 podría unirse en un futuro un tercer equipo en MotoGP, algo por lo que ya ha manifestado su interés pero para lo que aún habrá que esperar. ¿Quizá cuando anuncie su retirada?
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